Petroglifos En Punta Carretas, Uruguay

 “Esteban y su cruz” Los Petroglifos de Punta Carretas El área de interés se centra en el estudio arqueológico-histórico entorno a los grabados en lítico (petroglifos) hallados en la zona de Punta Carretas, sobre las costas del Río de la Plata. Las investigaciones comenzaron en el año 2017 a raíz del conocimiento de los mismos, gracias al programa Zona Desconocida1 . Estos grabados se hallan tallados en rocas pertenecientes al Escudo del Rio de la Plata2 , formación de aproximada de 2.100 millones de años; caracterizado por tener rocas del tipo Ortoneises y Gneisses. La Arqueología, a su vez, se define en términos generales como la ciencia que estudia el pasado a través de los restos materiales producidos y dejados por el hombre, muchos de los cuales subsisten hasta la actualidad. Para nuestro continente la arqueología se lleva adelante con un perfil antropológico, enmarcando los objetos y construcciones en relación a los comportamientos de los grupos humanos.

PUNTA CARRETAS Y SU HISTORIA 

Una de las primeras referencias a la zona se halla en una carta francesa del año 1698, donde se identifica la Punta Carretas que hoy conocemos como Punta Brava. Denominación dada debido a que parte de la costa se introducía pronunciadamente en el Río de la Plata; provocando que esta zona fuese muy temida para las embarcaciones que se acercaban demasiado a ella. La primera noticia escrita la tenemos casi cien años después, cuando el jesuita Pauche entre 1778-1779 se refiere a esta zona y señala: “los españoles llaman a esta hilera de peñascos Las Carretas”. 

PETROGLIFOS EN URUGUAY

Los antecedentes de hallazgos y estudios en Uruguay sobre manifestaciones culturales en soporte lítico, han permitido organizar estas expresiones en dos regiones bien definidas (Consens, 1985; Femenías et al, 2004). Por un lado se nuclean en la zona Sur, donde se focalizan en los departamentos de Flores y Durazno; donde la caracterización está dada por la existencia de algunas decenas de pictografías. Por otro lado se halla la zona al Norte del río Negro; donde se identifica en mayor medida la presencia de grabados en roca. Hasta el momento se han reportado y estudiado petroglifos en los departamentos de Artigas, Paysandú y Salto.

HALLAZGOS ARQUEOLÓGICOS EN LA ZONA DE PUNTA CARRETAS

El material cultural arqueológico correspondiente a la zona de estudio, se encuentran hoy en día en colecciones particulares, ejemplo Colección Maeso. Aquí encontramos del tipo lítico, específicamente puntas pulidas, recolectadas entre los años de 1920-1930 en la zona. Por su parte López Mazz (1987) hace referencia sobre hallazgos para las zonas de Parque Rodó, Parque de Golf y Punta Carretas; las cuales se hallan muy intervenidas por efecto de la urbanización. De significativa  importancia son los hallazgos en las costas de diversos objetos: cerámica, loza, vidrio, metal; rodados por efecto del agua, pertenecientes posiblemente a naufragios acontecidos en la zona.

INTERPRETACIÓN TENTATIVA

Los grabados en roca de nuestro interés, se hallan dispuestos en una serie de paneles, los cuales presentan marcadamente carácter histórico. Siendo que su contexto es básicamente genérico al soporte mencionado, no es factible inferir una cronología más cercana. Pero si es posible adentrarnos en una interpretación de su simbología.

Imagen 2: Fotografía del panel de petroglifos con el antropomorfo áureo y la cruz de Caravaca (cruz patriarcal). Fuente: Archivo particular de la autora. Uno de los paneles más significativos se halla representado por un antropomorfo áureo en forma de almendra. Hace referencia a la mandorla cristiana y a las imágenes pisciformes; relacionadas ambas a las primeras épocas del cristianismo. Destaca además una cruz de tipo patriarcal. Este tipo de cruz se halla compuesta de un pie y dos travesaños paralelos y desiguales, que forman cuatro brazos y un travesaño vertical uniendo a los anteriores. El primer travesaño horizontal representa el "titulus crucis", que Poncio Pilato hizo poner sobre la cruz de Jesús: INRI Jesús Nazarenus Rex Iudeorum (Jesús Nazareno Rey de los Judíos). De igual modo esta cruz se la conoce como la cruz de Caravaca o “Vera Cruz”, se trata de un “lignum crucis” (madera de la cruz), considerada como uno de los fragmentos de la cruz verdadera.

Cruz Patriarcal Flanqueada por Cruces Templarias

 A ambos costados del brazo inferior horizontal, aparecen dos ángeles, también señalados dentro de los relatos orales. Este tipo de cruz se halla representada muy tempranamente por ejemplo en la Basílica de la Natividad en Jerusalén (junto a cruces Templarias); así como en pinturas sobre madera de época Copta, algunas expuestas hoy en El Cairo, Egipto. 

Imágenes del tríptico que representa la Crucifixión y escenas destacadas de la Semana Santa. A la derecha y abajo escenas de una de las persianas y panel central inferior (s. XIII). Museo Copto, El Cairo. En amarillo detalle de la cruz patriarcal o cruz de Caravaca. Fuente: Archivo particular de la autora

La cruz de Caravaca perteneció según la tradición al patriarca Roberto de Jerusalén, primer obispo de Jerusalén -una vez conquistada a los musulmanes- en el año de 1099 por la primera cruzada. En la sexta cruzada en 1229, durante la estancia en la ciudad santa, el emperador Federico II, se halló en posesión de la reliquia; dos años después la cruz estaba en Caravaca (España). Fue custodiada por espacio de 50 años por los templarios, posteriormente por los franciscanos y finalmente por los jesuitas. Estos últimos serían quienes trajeron el símbolo hacia América. Uno de los ejemplos más representativos se halla en la Reducción Jesuítica de San Miguel Arcángel, en Brasil; llegando a nuestro territorio en épocas tan tempranas como en el siglo XVI. 

Cruz patriarcal ubicada en la plaza de la reducción Jesuita de San Miguel Arcángel (Estado de Río Grande do Sul-Brasil). La Misión fue establecida en 1632 por Cristóbal Mendoza. Declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1983-extensión 1984. Fuente: Imagen Izquierda: Fernando Gomes (2006)3. Imagen derecha y datos: Palacios, 2018:42. 

Desde este momento se tiene registro de diversas expediciones que han recorrido la costa del Río de la Plata. Según Riveros Tula los jesuitas de las Misiones realizaban viajes periódicos por la Banda Oriental para recoger ganado y realizar vigilancia; llegando a reconocer hasta buques naufragados. En 1678 una expedición desconocida “dejó en las márgenes del Río del Rosario, a una diez leguas de San Gabriel varias cruces y calvarios con sus fechas y nombre grabados en las piedras, que no serían descubiertas hasta 1694” (1959:40). Por su parte Pastells trascribe un expediente de 1694 que menciona: “…los portugueses han levantado varias cruces y calvarios por estos parajes y han visto los indios varias piedras en que han grabado los portugueses sus nombres, algunas desde 1678” (1923:298).

Cruz tallada en piedra. Fuente: Facebook PORT RÄTSEL
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Otro panel llamativo, es aquel donde se observa una figura antropomorfa muy definida, la cual presenta petroglifos asociados y puede ser interpretada bajo la lupa de diversas ramas del conocimiento.
(Fotografía correspondiente a otro de los paneles de petroglifos. Fue denominado “Esteban” durante el relevamiento. Fuente: Archivo particular de la autora).

La interpretación del panel es parcial debido a la condición como se encuentra (el bloque de piedra se halla tumbado sobre sí mismo). Este grabado fue llamado “Esteban” durante el relevamiento, denominación que surgió espontáneamente y que permitió increíblemente asociar varias figuras histórico-religiosas con la cruz de Caravaca, como ser San Esteban protomártir y Esteban I de Hungría. Las diversas fuentes a quienes se ha consultado le otorgan algunas connotaciones cristianas, místicas, masónicas y hasta de grupos indígenas foráneos a nuestra región. Lo cierto es que posee varios componentes de singular característica. Entre ellos: un rostro sonriente muy detallado, un triángulo con un círculo central en la frente (asociado a la simbología de un “tercer ojo” y en otra interpretación al “ojo que todo lo ve”); hacia su mitad derecha se observa un corazón (símbolo de la dedicación; entrega) y en su mano sujeta un pez (símbolo de poseer conocimiento; primeros cristianos). Hacia su izquierda aparece esbozada la que podría ser un ala (símbolo de elevación). Entre los grabados asociados podemos hallar una figura pisciforme, una espiral, un círculo con una cruz, una figura piramidal la cual se incrusta dentro de la roca. El último avance de investigación en cuanto a la figura de Esteban se adquirió este año (2021) cuando obtuvimos el dato de que una simbología similar había aparecido hace años, en la Estancia La Aurora; con respecto al mismo estamos recabando más datos. Como conclusiones preliminares; las diversas miradas abordadas hasta ahora, no permiten llegar a una conclusión final sobre la creación de estas figuras; aunque sí permiten abordarlas desde la interpretación simbólica. También es relevante señalar la existencia y casi desconocimiento de los mismos en una zona tan particular de Montevideo.

AGRADECIMIENTOS:
 A quienes dieron a conocer el lugar y por el cual me enteré de la existencia del mismo, dando un espacio de su programa, Henri Gelencser. A quienes me acompañaron en el relevamiento y sucesivas idas al sitio; Prof. Mgs. Jorge Baeza (Prof. de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación), mi gran colega Carina Amaro, mi esposo Ángel Aranaga, Cyro Etcheverry (Seres FM), Walter Pesah e Isabel Melesi. A todos aquellos interesados y que aportaron nuevos hallazgos, grupo GISS (en las personas de Alberto Fernández y Gonzalo Fierro). A Padrón Favre quien me aporto nuevas líneas de investigación y documentación. Y a todos aquellos que han visitado el lugar y que han publica en diferentes redes, aportando con su visión y conocimiento.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

Cabrera, L. y A. Florines (2015). Pinturas y grabados rupestres del Uruguay. Una actualización y revisión crítica. En: Cuadernos del Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano - Series Especiales. Nº2 Vol. 4, Año 2015 pp. 229- 250. ISSN 2362-1958.  Consens, M. (1985). “Arte rupestre en el Uruguay”. En: Estado actual de las Investigaciones arqueológicas en el Uruguay (Parte 1). Centro de Estudios Arqueológicos, nº 3. pp.62-69. Montevideo.  Femenías, J.; J. Baeza; A. Florines (2004). “Los petroglifos de Barriga Negra. Grabados al Sur del Río Negro (Uruguay)”. En: La Arqueología uruguaya ante los desafíos del Nuevo Siglo. X Cong. de Arqueología Uruguaya. Montevideo.  López Mazz, J.M. (1992). “Procesos de Transformación en sitios arqueológicos de los departamentos de Rocha y Montevideo”. En: 1ras Jornadas de Cs Antropológicas en el Uruguay (1987). IMPO. pp.125-130. Montevideo.  Palacios, J. C. (2018). Venimos de pueblos incendiados. Ed. Torre del Vigía. Montevideo.  Pastells. P (1923). Historia de la Compañía de Jesús en la Provincia del Paraguay. Madrid. Volumen IV. pp. 296.  Pauche, F. (1778-1779). “Una estadía entre los indios Mocovíes, 1749-1767”. Traducción al Castellano de Edmundo Wernicke (1942-1944). Ed. Secretaria de Producciones e industrias culturales (2010). Hacia allá y para acá. Iconografía y memorias completas. Santa Fe: Ministerio de Innovación y Cultura de Santa Fe.  Riveros Tula, A. (1959). “Historia de la Colonia del Sacramento (1680-1830)”. En: Revista del Inst. Hist. y Geográfico del Uruguay. Tomo XXII. Montevideo.  Declaración como Patrimonio de la Humanidad: Reducción Jesuita de San Miguel https://whc.unesco.org/es/list/275 Lic. Ana Gamas Arqueóloga 23 Diciembre 2020 (actualización para AIFOP Octubre 2021)